FORMACIÓN DE LAS NEURONAS: Fig. 18-9, pág. 318; fig. 18-11, pág. 320 (L).
Las células neuroepiteliales al dividirse por mitosis originan en un primer momento a los neuroblastos o células nerviosas primitivas, fig. 18-9 (L). Los neuroblastos al migrar hacia la capa del manto pierden su prolongación temporal (que es una dendrita transitoria), transformándose en un neuroblasto apolar. Al continuar con su diferenciación, le aparecen dos nuevas prolongaciones citoplasmáticas y se forma así el neuroblasto bipolar, una de estas prolongaciones se convierte en el axón, mientras que la otra se ramifica y se convierte en las dendritas primitivas; en esta etapa el neuroblasto se denomina neuroblasto multipolar, y es éste el que posteriormente se transforma en célula nerviosa adulta o neurona.
FORMACIÓN DE LA NEUROGLIA
Una vez se han formado los neuroblastos, las células del neuroepitelio se diferencian y forman las células de sostén primitivas o glioblastos, fig. 18-11, pág. 320 (L), las cuales migran hacia las capas del manto y marginal del tubo neural, diferenciándose en astrocitos y oligodendrocitos.
Existe otro tipo de célula glial llamada célula de microglía, que se derivan de las células mesenquimatosas.
Una vez formados los neuroblastos y la glía, el neuroepitelio se diferencia en células ependimarias o epéndimo.
